En la declaración, la Fundación Casa Memoria José Domingo Cañas rechazó, mediante una declaración pública, las palabras del ex Ministro Mauricio Rojas, en las que calificó como un «montaje» al Museo de la Memoria. En la declaración, cuyo texto se reproduce íntegro a continuación, la organización rechaza enfáticamente estas declaraciones, así como cualquier acción de carácter negacionista, y hace un llamado a no perder de vista que las violaciones a los derechos humanos continúan siendo una realidad del presente, frente a la cual es necesario denunciar y actuar para evitar la impunidad.

 

Declaración Pública

Considerando que aún mantienen vigencia las gravísimas e inaceptables declaraciones emitidas por el fugaz Ministro Mauricio Rojas (Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio) y el carácter agraviante de éstas; su evidente actitud negacionista acerca de los graves y alevosos hechos que acontecieron durante el periodo de la dictadura cívico militar.

Considerando que el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos tiene un rol fundamental en y para la educación, defensa y promoción de los Derechos Humanos, así como para el desarrollo de la Memoria Histórica del país.

DECLARAMOS QUE:

  1. El Museo de la Memoria y los Derechos Humanos es una clara expresión de solidaridad y reconocimiento a todas las personas que sufrieron violaciones a sus derechos fundamentales, así como a quienes resistieron y lucharon contra el terrorismo de Estado.
  2. No aceptamos ni aceptaremos pasivamente declaraciones de índole similar a las emitidas por el ex Ministro, así como todas aquellas afirmaciones, declaraciones o acciones de carácter negacionista que vienen a sumarse a la serie de hechos que fomentan y mantienen la impunidad de todos aquellos criminales de lesa humanidad que han sido beneficiados, hasta ahora, por el Poder Judicial. Consideramos que estas acciones son una ofensa a todas las víctimas, familiares, amistades y, en suma, a toda la sociedad civil. Por lo que las rechazamos profundamente, así como a todos los crímenes de lesa humanidad e imposiciones instauradas por la dictadura cívico militar.
  3. Los Derechos Humanos tienen un carácter universal, interdependiente e indivisible; son normas jurídicas que deben ser protegidas y respetadas por todos los Estados; no dependen de los gobiernos, por lo que limitar su defensa, respeto y promoción a la línea política e ideológica de las y los gobernantes, demuestra una negligencia gravísima por parte del Estado chileno.
  4. Expresamos nuestro respaldo a las y los trabajadores del Museo de la Memoria y los Derechos Humanos en su trabajo por mantener la memoria histórica, así como al conjunto de trabajadoras, trabajadores y personas de la cultura, las artes, el patrimonio y de los Sitios de Memoria que se esfuerzan, además, en mantener no solo la imprescindible vigencia de la memoria de los hechos del pasado y su permanente diálogo con los desafíos sociales del presente, sino también en la necesidad imperante por denunciar los atropellos y violaciones sistemáticas a los Derechos Humanos en la actualidad, como condición fundamental para asegurar una sociedad futura sólida en el respeto y ejercicio de los Derechos Humanos.
  5. Creemos que más allá del corto paso de Mauricio Rojas por el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, actualmente se desarrolla una política de gobierno y el oficialismo, que está revitalizando el terrorismo de Estado, tal como se observa actualmente en el Wallmapu con la evidente militarización del territorio Mapuche, la presencia de fuerzas policiaco-militares preparadas para la guerra y no para la solución pacífica de un conflicto histórico; y en los permanentes ataques contra diversas comunidades Mapuche de las regiones del Bío Bío y de La Araucanía. Así también, como se está observando en la represión constante y progresiva a las organizaciones que se movilizan legítimamente en demanda de sus derechos, especialmente niñas, niños y jóvenes estudiantes secundarias y secundarios.
  6. Finalmente, advertimos que el caso del nombramiento y posterior renuncia de Mauricio Rojas, no debe distraernos del hecho que en nuestro país se mantiene la práctica de la vulneración y violación sistemática de los derechos de las personas que se movilizan, mediante la práctica de la tortura individual, colectiva y social; frente a la cual, los agentes del Estado perpetradores gozan de total impunidad y libertad de acción.

Por todo lo expuesto, llamamos a las organizaciones sociales y al conjunto de la sociedad civil a mantener viva la movilización y exigencia de Justicia y Verdad, junto a la demanda de NO MÁS TORTURA E IMPUNIDAD en el Chile de hoy.

22 de agosto de 2018,


Casa Memoria José Domingo Cañas – Fundación 1367
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